Quedamos en Espierba con Barré. Espierba, un pueblo a media ladera del valle de Pineta, con unas vistas increíbles de la Sierra de la Zucas y de las Tres Sorores. ¿Tres Sorores? “Eso aquí no se ha dicho nunca”. Aquí toda la vida les hemos llamado Tres Herodes. Y aún viene algún tonto de Zaragoza a decirnos que si se llamaban así o asá”. Esto es lo primero que me cuenta Luis Ángel Saludas, “Barré” (aquí a la gente se le conoce por el nombre de la casa). Un hombre achaparrado, fibroso, duro. No debe ser fácil tumbar a un hombre así, tan enraizado a la tierra.
Barré parece un pastor solitario, pero más que eso: es un erudito de las montañas, de su toponimia, del cómo vendrá el tiempo del puerto, de su “país” (recordad, país es aquello que pisan sus pies, su territorio), de su pueblo y de sus ovejas.
Nada más ver a Idoipe dice conocerlo. “A ti te vi en la tele, eres ese que hace música electrónica. Te vi en el Aragón en abierto”. Barré está al tanto de todo.
Autor: Javier Jiménez (Freeman Creación Audiovisual)
Fotografía por MARCOS CEBRIÁN